Pese a casi triplicar la cifra de casos en la cuarta ola de COVID-19 respeto de la primera, Bolivia logró un bajo índice de letalidad, estrategia que prevé ser replicada en el quinto oleaje de contagios para reducir aún más la cifra de decesos, anunció el ministro de Salud, Jeyson Auza.
“Estamos cerrando la cuarta ola epidemiológica con un 0,7 por ciento de letalidad, lo que dista mucho de lo que ha sido la primera ola donde reportamos un 6,2 por ciento de letalidad”, dijo en el informe epidemiológico de la semana 22.
De acuerdo al informe del Ministerio de Salud, en el tema de los casos reportados, en la primera ola se anotaron 144.592 contagios, lo que casi se triplica en la cuarta ola con 406.638 casos con registros de un récord histórico de toda la pandemia en enero de este año, con 14.000 casos en un día.
Bolivia cerró la cuarta ola de la COVID-19 con 2.779 fallecidos, a diferencia de la primera ola cuando murieron 9.005 personas.
A decir del ministro, para obtener resultados positivos en este nuevo rebrote de la pandemia, se requiere el apoyo de toda la población boliviana con la disciplina para sostener las medidas de bioseguridad y la concurrencia a los centros establecidos para la inmunización.
El país sudamericano marcó hasta el 5 de junio un acumulado de 910.516 casos positivos, 872.888 personas recuperadas (95,86 por ciento) y 21.949 decesos.
El 10 de marzo de 2020 se confirmaron los dos primeros casos de coronavirus en el territorio boliviano, constituyéndose en el último país en sumarse a la lista de naciones de América Latina que registraron casos de COVID-19.
Bolivia vive una nueva normalidad este año, con el registro en las cuatro últimas semanas del continuo incremento de contagios que acercan en toda la pandemia paulatinamente al millón de positivos, según datos del Ministerio de Salud.
Auza consideró que las medidas de bioseguridad y la inmunización contra la COVID-19 permitirán enfrentar la quinta ola.
En dos años y tres meses de pandemia, Bolivia vive desde febrero de este 2022 una nueva normalidad con la reactivación del 100 por ciento de actividades y la amenaza de la quinta ola. El Gobierno instruyó el reforzamiento de la inmunización y medidas de bioseguridad.