El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, sancionó una ley que facilita la creación de cuentas bancarias en dólares para las personas físicas en el país, la cual fue publicada en el Diario Oficial y entrará en vigor dentro de un año.
Conocido como “nuevo marco cambiario”, el texto moderniza la legislación que data de 1935, y representa una “revolución” en el mercado de divisas, según el Banco Central.
La norma establece que es competencia del Banco Central reglamentar las cuentas en moneda extranjera. Al enviar la propuesta, sin embargo, la autoridad monetaria resaltó que ese permiso debe ser conducido “de forma gradual y prudente”.
Entre las principales novedades está la elevación del límite máximo del monto permitido en los viajes internacionales, de 10.000 reales (unos 1.792 dólares) a 10.000 dólares o su equivalente.
También permite que las personas físicas realicen en el país operaciones de compra o venta de moneda extranjera en efectivo por valor de hasta 500 dólares o su equivalente en otras monedas, de forma ocasional y no profesional.
La norma también crea facilidades para que la compra y venta de divisas pueda hacerse con otros agentes, no sólo con bancos y corredores, y abre el camino para que los bancos e instituciones financieras inviertan en el extranjero.
Permite además la apertura de una cuenta en dólares en Brasil por parte de un inversor extranjero o en casos específicos que deben ser justificados ante el Banco Central, y facilita el envío de remesas desde el extranjero a una institución brasileña que tenga un corresponsal bancario fuera del país.
En un comunicado, la Secretaría General de la Presidencia de la República señaló que “la propuesta permite que los bancos e instituciones financieras brasileñas inviertan en el exterior recursos captados en el país o en el extranjero, y facilita el uso de la moneda brasileña en las transacciones internacionales”.
Las instituciones financieras autorizadas para operar por el Banco Central podrán utilizar los recursos para destinar, invertir, financiar o prestar en el territorio nacional o extranjero.
La ley también abre la posibilidad de realizar pagos en moneda extranjera para las obligaciones que vencen en Brasil, y permite el pago de contratos de “leasing” (arrendamiento) entre residentes brasileños, si los fondos se obtienen en el extranjero.
En el nuevo marco cambiario, algunas atribuciones del Consejo Monetario Nacional son transferidas al Banco Central, “como la regulación de las operaciones de cambio, los contratos de cambio futuros utilizados por el Banco Central y la organización y supervisión de las empresas de corretaje de valores y de cambio”.