Los resultados alcanzados en este año atípico, por jóvenes cubanos de preuniversitario en concursos internacionales de Computación, y la no participación en la 61 Olimpiada Internacional de Matemática recién culminada en Rusia, me han motivado a escribir este artículo para Cubadebate, con mi incurable convicción, de luchar por que ambas disciplinas científicas estén en el alma, el pensamiento y la conciencia de nuestra nación y de cada uno de sus ciudadanos.
Aclaro dos cosas esenciales.
La primera es que no es mi intención retar a las instituciones cubanas encargadas de gestionar la participación de estudiantes y profesores en estos eventos. La segunda es que mucho valoro la participación en otras asignaturas de disciplinas científicas, que también han cosechado buenos resultados.
Cuba tiene una larga trayectoria en los concursos regionales y mundiales de ambas disciplinas, la Matemática con más antigüedad por razones obvias, desde 1971. Escribir exageradamente desde la emoción no será jamás una buena práctica, cuando se quiere razonar para mejorar lo que hacemos. Pero dejar sin emoción a la razón, tampoco es atinado.
Los concursos de Matemática llegaron a mi vida desde muy joven, todos en la década de 1960; primero en la Secundaria Básica Ramón Campa de mi natal Palma Soriano, luego en los Preuniversitarios Josué País y Cuqui Bosch de Santiago de Cuba.
Unos pocos años después, ya graduado como Licenciado en Matemática en la Universidad de La Habana, volvió a prenderse la chispa en la Escuela Vocacional Lenin (1973-1981), entonces como profesor de Matemática y también de Computación.
En Matemática tuve el privilegio de integrar el Equipo Nacional de Entrenadores, junto a los emblemáticos Luis J. Davidson, Raimundo Reguera y Félix Recio. En La Lenin, fui profesor y entrenador de estudiantes de alto talento y rendimiento en Matemática. Cómo olvidar a Morgalo, Desdín, Luis García, Alejandro, Jorge, Sara, William, Roberto, Hernán, Ariza, ….Y de otras provincias o escuelas a Ramiro, Alberto, Arturo , Pedrosa, Reboyar,… Cuánta alegría me regalaron y cuánto aprendí de ellos. En la 18 Olimpiada Internacional de Matemática, realizada en Austria en 1976, fui profesor acompañante.
En Computación, me tocó la dicha de ser el iniciador de los concursos de Computación desde la base, primero en La Lenin, cuando la Computación se impartía como una asignatura facultativa, que no promediaba, pero que era obligatorio aprobarla para pasar de grado.
La Lenin fue la pionera en la introducción curricular de la computación, luego se sumaron las restantes Vocacionales. Propuse al MINED que se organizaran los Concursos Nacionales de Computación, y en espera de la respuesta oficial, convencí a los profesores de la Cátedra General de Computación que yo dirigía, que cada mes aportáramos 10 pesos, para crear un fondo y sufragar el costo de un almuerzo en el Restaurante Las Ruinas, del Parque Lenin, con la participación de los 8 estudiantes ganadores y sus respectivos profesores. ¡Qué pena que en aquellos tiempos no se habían inventado los celulares para recoger en imagen aquellos agasajos!
Pasando a algunas consideraciones conceptuales sobre la importancia de los concursos de conocimientos, compartiré con ustedes las siguientes ideas y convicciones.
- El talento tiene una cuota de herencia, y otra muy importante de lo adquirido en la práctica social concreta.
- La heredada suele medirse por test de inteligencia intelectual, aunque no siempre un buen test mental aporta conclusiones contundente.
- La motivación, el reto a la inteligencia, la competencia fraternal suele despertar fuerzas mentales inimaginables.
- Un profesor capacitado, entrenado y deseoso de desarrollar el talento de sus alumnos puede lograr maravillas con y de ellos.
- Un profesor entrenador con buenos resultados debe ser reconocido y puesto en lugares cimeros.
- Es cierto que además de la realización de los Concursos de Conocimientos, existen otras variantes para desarrollar el talento, como es el caso de las Jornadas Científicas Estudiantiles y los Exámenes de Premio, entre otras.
- La gratificación moral y material, y la divulgación de los resultados meritorios, también resultan de la mayor importancia. Algo que considero todavía insuficiente.
- No debemos divorciar la justa declaración de desarrollar al máximo el talento de nuestros jóvenes, de las acciones concretas que han de confirmarla.
Sé que en muchos años no hemos tenido el financiamiento requerido para llevar a todos los estudiantes que la convocatoria de una Competencia Internacional permite, ni a los dos profesores acompañantes que deben jugar roles diferentes. En algunas ocasiones, aunque las menos, no hemos podido participar. No me cansaré de luchar porque esto no suceda, por buscar ideas creativas y soluciones alternativas para que Cuba, siempre, siempre esté presente.
No es el propósito de este artículo desplegar tablas con la participación de Cuba en estos concursos, aunque mucho me gustaría que los compañeros Taquechel o Maykel, importantes funcionarios del MINED, con quienes hablé en estos días publicaran en Cubadebate los resultados de la participación cubana en estas lides en todas las asignaturas, desde sus respectivos inicios.
Como ya dije, el presente año 2020 ha sido atípico debido al azote de la COVID-19, lo que ha llevado a que las Organizaciones Directivas y los Organizadores de las Competencias, hayan decidido realizarlas de manera no presencial, es decir en la modalidad online o virtual.
De esta manera Cuba participó en dos eventos internacionales en Computación e Informática.
En La Competencia Iberoamericana de Informática y Computación, CIIC 2020, realizada el 5 de septiembre, gestionada desde México en una plataforma informática en línea, y en el que Argentina estuvo a cargo de coordinar la participación y confeccionar el temario de ejercicios. En dicho evento nos ubicamos en tercer lugar, con dos medallas de oro, dos de plata y cuatro de bronce. La selección cubana estuvo integrada por 12 estudiantes, donde se incluyeron 5 de Villa Clara, 1 de Cienfuegos, 2 de Granma, 2 de Las Tunas y 1 de Pinar del Río. Pueden consultar un artículo en Cubadebate del 12 de septiembre.
Y en la más reciente IOI (Olimpiada Internacional de Informática) coordinada por Singapur, también online, en la que obtuvimos dos medallas de bronce, al igual que Brasil y México, pero Cuba con más puntos.
Los dos medallistas de bronce fueron Humberto Yusta Gómez que obtuvo puntos en los 6 ejercicios; fue la segunda mejor nota de Iberoamérica. Y Manuel Darío Oliver Ballesteros que también obtuvo puntos en los 6 ejercicios; y fue cuarta mejor nota de Iberoamérica.
También participaron Leonardo Daniel Artiles Montero, y Alberto Leyva Guerra que obtuvieron puntos en 4 de los 6 ejercicios.
Ambos eventos se caracterizaron por exigencias técnicas y organizativas que aseguraran el buen funcionamiento de la competencia y la bioseguridad; y que además aseguraran la integridad en los exámenes.
Sabemos que La Habana ha estado en los últimos meses en una situación crítica en el control de la COVID-19, lo que ha impedido la participación de sus estudiantes destacados, para poder representarnos en los anteriores eventos.
Termino con la triste realidad de la no participación cubana en la 61 Olimpiada Internacional de Matemática (OIM), o IMO por sus siglas en inglés, realizada online desde la ciudad Rusa de San Petersburgo, del 21 al 24 de septiembre de 2020.
Como ya dije conversé calmadamente con los dos funcionarios del MINED, responsables directos de la actividad, también con dos entrenadores muy destacados y activos: Enech y Evidio, así como con Sofía, ganadora de Oro Perfecto en una Olimpiada Centroamericana, y que hoy estudia Matemática en la UH, y sigue siendo una activista de estas lides.
Pude ganar elementos en cuanto a la decisión de no participar en dicha Olimpiada, ya que las exigencias eran mucho más fuertes, y se decidió evitar riesgos reales como el contagio con el Sars-Cov-2, de estudiantes, profesores y demás personas que imprescindiblemente debían participar. Era un requisito la participación presencial de un comisionado neutral designado por la Junta de IMO, que debía viajar a Cuba para velar por la integridad del proceso y sus resultados.
También era un requisito concentrar a los competidores en un local, con las medidas de bioseguridad, observar mediante cámaras web durante cuatro horas y media a cada estudiante elaborando sus respuestas, cada día, 21 y 22 de septiembre, y luego enviar los vídeos al equipo de vigilancia en Rusia. Existen otros detalles en los que no entraré, pero que incrementan las dificultades objetivas para cumplirlas.
Sabemos que el Centro Nacional de Entrenamiento “Eduardo García Delgado”, en la provincia de La Habana y la UCI, que serían candidatos a sedes han tenido que dar el paso al frente para el combate frente a la Covid-19. Había que además asegurar el traslado de estudiantes y entrenadores de otras provincias que están en fases de recuperación de la epidemia, para La Habana, que tuvo que regresar a la fase anterior.
Insisto en que mi artículo no es una información oficial, eso le corresponde a los funcionarios del MINED, pero no quiero dejar de informar lo que he conocido, bien por haber leído los documentos oficiales de la Junta IMO=OIM, como por lo esclarecido en mis conversaciones ya mencionadas.
Agradezco al buen amigo, Ingeniero Dovier Antonio Ripoll Méndez, Director General ICPC Caribe, por haberme enviado los resultados de los cuatro cubanos en la IOI (Olimpiada Internacional de Informática) y de la 61 OIM coordinada por Rusia, que tuvo su sesión de clausura el 28 de septiembre de 2020.
Seguramente los colegas del MINED, intercambiarán con representantes de los países de nuestra región que participaron en esta edición, por primera vez en la modalidad online, para sacar conclusiones provechosas.
Al final podrán observar en sendas tablas: los 10 primeros países en el ranking mundial, y los resultados alcanzados por los 16 de Latinoamérica y el Caribe de la 61 OIM.
Sobre la OIM 2021, se ha dicho que EEUUAA, se retiró como Sede, y que la Junta IMO espera que se pueda realizar presencialmente en otro país. También se confirma a Noruega como Sede para la IMO 2022.
En lo que resta de año está la Olimpiada Centroamericana de Matemática, planificada para el 23 de octubre, en la que ya se trabaja por las autoridades competentes cubanas. Esperamos que Cuba pueda participar y cosechar éxitos.
Considero que debemos sacar experiencias en cuanto a la realización de competencias virtuales en el ámbito nacional, para que después que la Covid-19 haya sido declarada como endemia, continuemos desarrollando esta modalidad.. Claro que en asignaturas como Física y Química las cosas en la modalidad virtual se deben complicar. Sería bueno que los expertos en estas asignaturas escribieran sus opiniones.
He conversado también con el colega Luis Ramiro Piñeiro, presidente de la Sociedad Cubana de Matemática y Computación, quien siempre ha respaldado estas competencias en Cuba y en el extranjero.
Mis palabras finales van dirigidas a los estudiantes y entrenadores, que han trabajado duro en este aciago 2020, y que son los principales artífices para lograr una digna participación de nuestra amada Patria.
Hoy más que nunca necesitamos captar, desarrollar y retener a los jóvenes talentosos, como base de la futura vida profesional de cubanos y cubanas.
Como de costumbre espero sus comentarios, opiniones, aclaraciones, desacuerdos y sugerencias, para que el pensar y hacer colectivo nos permita avances duraderos y consistentes.