En Ecuador, uno de los países suramericanos más azotados al inicio de la pandemia de COVID-19, se ha desarrollado un cementerio digital que tiene como objetivo brindar un último adiós más decoroso a las miles de víctimas que ha dejado la pandemia en su paso por el país.
“Recordar es volver a vivir” es el eslogan que se lee en la plataforma Eternos.ec donde los seres queridos que acaban de partir pueden recibir un último homenaje en un momento donde los sepelios convencionales no están disponibles.
En la plataforma, familiares, amigos y allegados de los fallecidos podrán crear obituarios digitales, dejar sus mensajes, publicar una galería de fotos para recordar e incluso encender una vela en memoria de su fallecido. El servicio se ofrece de manera totalmente gratuita.
Actualmente, en Ecuador, tras la muerte de una persona por coronavirus y un primer empaque, los familiares deben coordinar con las funerarias la disposición final de los restos y determinar, si existe un plan mortuorio, la entrega de las cenizas a la familia o al lugar de la tumba.
De acuerdo con los protocolos establecidos en marzo, si los fallecidos no cuentan con seguro funerario, las autoridades locales serán las encargadas de coordinar con la administración municipal del cementerio la asignación del espacio de entierro o el crematorio.
Ecuador registra hasta el momento 6.648 fallecidos confirmados por COVID-19.