Las manifestaciones contra el controvertido proyecto de ley de seguridad se reanudaron en Francia, con congregaciones de grandes multitudes a pesar de la nieve, dando lugar a altercados con la Policía en al menos una ciudad, según la prensa local. Se registraron al menos 80 manifestaciones a favor de la libertad a nivel nacional y para denunciar el proyecto de ley.
En París, varios miles de personas se manifestaban bajo una lluvia rumbo a la simbólica plaza de la Bastilla detrás de una pancarta pidiendo la retirada de este texto y al grito de “Policía en todos lados, justicia en ninguno”. El ministro del Interior, Gérald Darmanin, informó que 75 personas fueron detenidas, 24 de ellas en París y que 12 policías resultaron heridos.
El proyecto de ley sobre seguridad incluye disposiciones sobre las cámaras para peatones o el uso de aviones teledirigidos, y ha suscitado la preocupación de las asociaciones ciudadanas o de los activistas de izquierda, pero es el artículo 24 del texto el que ha cristalizado las pasiones y los antagonismos.
Para “proteger a los que nos protegen, sobre todo en las redes sociales”, el partido presidencial quiere castigar con un año de prisión y una multa de 45.000 euros (53.000 dólares) la difusión de “la imagen del rostro o cualquier otro elemento de identificación” de los miembros de la fuerza policial en intervención, cuando “dañe” su “integridad física o psicológica”.
El organismo nacional de derechos humanos de Francia, así como varias agencias de la ONU y la Unión Europea (UE), han criticado el proyecto de ley y expresado su preocupación por los artículos de este que allanarían el camino para la vigilancia masiva, la violación de los derechos de privacidad, los datos personales, la libertad de reunión pacífica y la libertad de prensa.
Estas “marchas por las libertades”, convocadas por grupos de defensa de derechos humanos, sindicatos y asociaciones de periodistas, llegan semanas antes de que el Senado examine esta ley, adoptada ya en primera lectura por el Parlamento.
“Lo que está en juego (…) es importante, afecta al respeto mismo del Estado de derecho y del control de las autoridades por los ciudadanos, el Parlamento, la justicia y la prensa”, estiman estas asociaciones, que piden la retirada de varias disposiciones de la ley, como el artículo 24 sobre la difusión de imágenes de agentes.
La movilización iniciada el 17 de noviembre se tradujo en varias manifestaciones, en ocasiones marcadas, especialmente en París, por enfrentamientos con las fuerzas del orden. Hasta un medio millón de personas se manifestó el 28 de noviembre en Francia, 133.000 según el gobierno.