El primer ministro Kishida Fumio dice que Japón debe prepararse para el peor de los casos de pandemia. En su discurso de año nuevo, el líder habló sobre cómo detener una nueva oleada de coronavirus.
Kishida dijo: “Haré de este año un año en el que asumamos con valentía cualquier desafío y abriremos una nueva era. Por otro lado, tendré en cuenta la necesidad de humildad y manejaré las situaciones con delicadeza”.
Kishida diseñó específicamente planes para proteger el sistema de salud. Eso incluye el uso de nuevos tratamientos orales.
Kishida se comprometió a revisar los requisitos de hospitalización. Dice que el gobierno está explorando formas de permitir que las personas se recuperen en casa.
Kishida dice que la amenaza de Omicron sigue siendo la principal prioridad del gobierno. Japón implementó controles fronterizos estrictos en respuesta a la variante.
Prácticamente prohíben la entrada de nuevos extranjeros.
Kishida dice que decidirá la próxima semana si continuará o aliviará esas medidas después de evaluar el efecto de las vacaciones de fin de año en la situación.