
Meteorólogos japoneses advirtieron a los residentes de Kumamoto, en el suroeste de Japón, que estén alertas ante la posibilidad de más lluvias fuertes después de que las inundaciones y los deslizamientos de tierra dejaran al menos 34 muertos y decenas desaparecidos o atrapados en áreas inundadas.
Se esperan lluvias torrenciales todo el día lunes y martes.
Las fuertes lluvias, de hasta 100 milímetros por hora, desbordaron el río Kuma. Los deslizamientos de tierra en muchas carreteras están dificultando los esfuerzos de rescate. Las líneas eléctricas están caídas, cortando la electricidad y las comunicaciones en las aldeas de la prefectura.
Las autoridades anunciaron que muchos de los muertos y desaparecidos son residentes mayores de un hogar de ancianos cerca del río.
Más de 40.000 soldados, miembros de la guardia costera y bomberos están ayudando con las operaciones de búsqueda y rescate.
Japón tiene un amplio historial en materia de desastres naturales. En las últimas grandes inundaciones de 2018, los fenómenos naturales cobraron las vidas de más de 200 personas.