Los pesos mínimos del boxeo han sido un campo fértil de campeones para México.
De la división de peso paja (105 libras) a la división de peso gallo (118 libras), el boxeo azteca ha visto varios pequeños gigantes.
Rubén Púas Olivares, Miguel Canto, Carlos Zárate, Humberto Chiquita González, Ricardo Finito López y Juan Francisco Gallo Estrada son algunos de los peleadores que se han consagrado en los pesos mínimos.
En el último año, un púgil mexicano que se ha estado abriendo camino para seguir con esta gran tradición es Esteban Bermúdez.
El originario del área de Nezahualcóyotl, Estado México es el vigente campeón Regular de peso minimosca (108 libras) de la Asociación Mundial del Boxeo (AMB). Este 10 de junio se estará enfrentando al japonés Hiroto Kyoguchi 15-0-0 (10 KOs) por el Súper título de la AMB de las 108 libras con el intento de establecerse como un campeón absoluto.
Bermúdez (14-3-2, 10 KOs), debutó en el boxeo de paga en 2015; se fue invicto en sus primeros 10 combates. Luego su carrera entraría en una etapa difícil. Colectó tres derrotas en sus siguientes seis contiendas, la primera fue por nocaut.
Sin embargo, Esteban corrigió su rumbo y se encontró ante la oportunidad más grande su carrera cuando se midió frente al venezolano Carlos Cañizales por el título Regular minimosca de la AMB el 28 de mayo de 2021.
El mexicano entró con los pronósticos en contra. Ya en la pelea, fue dominado ampliamente durante los primeros cinco rounds.
Pero en el sexto asalto, Cañizales se descuidó y Bermúdez aprovechó de gran manera. Lo tumbó dos veces con dos mortíferos derechazos que obligaron al referee a detener las acciones. Esteban se coronó por nocaut técnico; al momento que se finalizó el duelo estaba abajo en dos tarjetas.
El púgil de 26 años había alcanzado la cima en deporte que le ayudó en sus años de desarrollo.
“Yo soy de Ciudad Lago, entre Ciudad Nezahualcóyotl y Ecatepec; soy de en medio. Llegué al boxeo por lo que ahora llaman bullying. Antes me agarraban de bajada ahí donde vivía, igual que a uno de mis hermanos”, dijo Bermúdez a ESPN después de coronarse. “Pero aprendí esta disciplina y gracias a Dios lo agarré, lo quise y hoy soy campeón del mundo”.
Esteban no ha peleado desde su choque con Cañizales. Estaba programado para regresar en octubre y defender su cinturón ante el mexicoamericano Jesse Bam Rodríguez. Pero la AMB optó por no avalar ese combate. Ahora Bermúdez tiene una oportunidad de ir por la máxima corona del organismo en su peso.
